El PSOE de Santa Eulària denuncia que Carmen Ferrer esconde información en relación con la falta de mantenimiento y coste económico del jardín vertical El grupo Socialista de Santa Eulària des Riu denuncia públicamente que la alcaldesa, Carmen Ferrer, esconde información en relación con el mantenimiento del jardín vertical de la calle del Sol. El pasado 10 de agosto, el PSOE registró una pregunta con solicitud de respuesta por escrito en relación con el mantenimiento de esta instalación, que se encuentra en un notorio mal estado, presentando agujeros vacíos, plantas secas o quemadas por el sol. Más de un mes después, el equipo de gobierno continúa sin responder, escondiendo a la ciudadanía información sobre la gestión de un jardín que tenía que ser “vanguardista” y que se ha acabado convirtiendo en una pared llena de agujeros y plantas secas. El grupo socialista se pregunta si “es que no se han seguido las directrices de los pliegos y ahora se están haciendo las visitas y los informes deprisa y corriendo para poder justificar la respuesta a nuestro grupo”. “Este hecho nos parecería escandaloso, por lo cual exigimos una respuesta urgente de esta solicitud”, ha manifestado el portavoz del PSOE, Ramón Roca. El grupo socialista considera que “esta manera de funcionar del departamento de Medio Ambiente, sin transparencia, se tiene que acabar”. Una instalación que “cada día que pasa está en peores condiciones, sin que la alcaldesa haga nada para revertir este hecho”. En el escrito registrado el 10 de agosto, el grupo Socialista preguntaba si se cumplen los requisitos establecidos en el pliego de condiciones de la licitación y el posterior contrato de mantenimiento de jardines, adjudicado en 2022 por 650.000 euros al año. En concreto podemos destacar que el contrato exigía que el jardín vertical fuese gestionado de forma automatizada por una “tecnología iWall de jardín vertical o similar”, la cual, mediante los sensores de humedad instalados en diferentes puntos del jardín vertical, detecta las necesidades de agua y emite la orden de regar a los emisores de riego. Este sistema también tendría que detectar si hay obstrucciones o anomalías en el sistema de riego. Además, contempla la visita de un técnico cada quince días para determinar posibles necesidades y afecciones de la vegetación del jardín vertical, así como revisar y planificar trabajos de mantenimiento de jardinería, haciendo un informe complementado con imágenes fotográficas para llevar un seguimiento objetivo del estado del jardín. Igualmente, se comprometía a, a causa de la calidad del agua de la zona de Santa Eulària des Riu, revisar exhaustivamente los componentes del sistema de riego, para evitar la obstrucción por calcificación. El contrato también establece el compromiso de reponer las plantas, por anticipado de la empresa de mantenimiento si era debido a deficiencias o averías del sistema de riego o adobado, mientras que las pérdidas por vandalismo y fenómenos meteorológicos extremos son por cuenta del Ayuntamiento. El grupo Socialista de Santa Eulària exigió a la alcaldesa “que explicara si el sistema de riego y el mantenimiento funciona correctamente, si se están haciendo las visitas y los informes previstos por contrato” y “cuáles son las causa del estado deplorable del jardín”. Además, el grupo Socialista exigía a la alcaldesa que explique todos los gastos que el jardín vertical está suponiendo para el ayuntamiento, como son las reposiciones a causa de fenómenos meteorológicos extremos. Preguntas que a día de hoy continúan sin respuesta por culpa de la “falta total de transparencia” del equipo de gobierno de Carmen Ferrer.